Cuentos, cuentos, cuentos...
Alfonso Reyes
De uno a otro extremo de la Cámara, grita el diputado aristócrata:
–¡Dese usted por abofeteado!
Y el demócrata, encogiéndose de hombros, le contesta:
–¡Dese usted por muerto en duelo!
No hay comentarios:
Publicar un comentario