domingo, 4 de agosto de 2024

Apariciones

Woody Allen

 

El 16 de mayo de 1882 el señor J. C. Dubbs despertó en mitad de la noche y vio a su hermano Amos, que llevaba muerto catorce años, sentado a los pies de su cama y desplumando gallinas. Dubbs le preguntó a su hermano qué estaba haciendo allí, y éste le respondió que no se preocupara, que seguía muerto y que había venido a la ciudad únicamente el fin de semana. Dubbs le preguntó a su hermano cómo era “el otro mundo” y éste le respondió que no muy distinto de Cleveland. Añadió que había vuelto para comunicarle a Dubbs un mensaje, que llevar un traje azul oscuro con calcetines rosa pálido es un gran disparate.

En ese momento entró la joven sirvienta de Dubbs y vio a Dubbs hablando con una “niebla informe y blanquecina”, la cual, dijo luego, le recordó a Amos Dubbs, pero su aspecto era un poco más agradable. Finalmente, el fantasma le pidió a Dubbs que lo acompañara en un aria de Fausto, que ambos entonaron con gran fervor. Al despuntar el día, el fantasma atravesó la pared, y Dubbs, que pretendía seguirlo, se fracturó la nariz.

Éste se presenta como un ejemplo clásico del fenómeno de aparición y, si hemos de creer a Dubbs, el fantasma reapareció, hecho que hizo que la señora Dubbs saltara de su silla y revoloteara durante veinte minutos sobre la mesa donde estaba puesta la cena, hasta que se estrelló en la salsa. Es interesante observar que los espíritus tienen tendencia a mostrarse traviesos, lo cual A. F. Childe, el místico inglés, atribuye al marcado complejo de inferioridad que les produce estar muertos. Las “apariciones” guardan frecuente relación con individuos que han tenido un fallecimiento insólito. Amos Dubbs, por ejemplo, murió en circunstancias misteriosas cuando un granjero lo sembró accidentalmente junto con unos nabos.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario